Las ventas han sufrido una suerte de mutación con la llegada de la virtualidad. Aún más en pandemia. Las ventas online han crecido exponencialmente y, quizás, las plataformas digitales se han convertido en la vidriera por excelencia para los negocios. Saber cómo vender en este terreno es un deber. En este posteo te damos unos consejos para sacar provecho de este nuevo tipo de comercialización.
Saber a quién dirigirse, dónde y cómo es una ecuación que te dará como resultado una conversión. Dar los pasos correctos y brindar el contenido adecuado hará que tus ventas vayan en línea ascendente. Pero, no olvides, que la virtualidad no quita el factor humano. A las personas les gusta conectar con humanos, no con robots.
Aunque te manejes en un rubro donde los productos o servicios que tengas para ofrecer se parezcan a los de tu competencia, busca tu factor diferencial. Dale un motivo a tus clientes potenciales para elegirte ¿Por qué ellos deberían comprarte a vos? ¿Tenes precios más accesibles? ¿Ofreces una política de devolución en caso de fallas? ¿Cuentas con combos o promociones interesantes que permitan descubrir otros productos?
Las redes sociales hoy por hoy son una vidriera para los negocios. Son un primer contacto virtual con la marca donde pueden observar lo que tienes para ofrecer. Y también conocer tu comunidad, ver tu cantidad de seguidores y si recomiendan o no tus servicios.
También es un gran canal de comunicación para fortalecer y fidelizar tu vínculo con clientes preexistentes y compartir experiencias que sirven como gancho para aumentar tu credibilidad y ventas.
Contar con una plataforma sencilla que sea fácil de navegar para lograr una conversión es clave. Las páginas que tardan demasiado en cargar, son muy complejas o no están optimizadas para todo tipo de dispositivos terminan en rebote. Y eso es lo que no queremos. Poder tener una página que tenga acceso a tus productos, tienda y contacto es el principio básico para poder comercializar de manera eficiente.
Prueba con alcanzar audiencias similares a las que ya tienes. Puedes encontrar un nuevo caudal de clientes a los que jamás pensaste que ibas a poder alcanzar o interesar. Investigar las de tus competidores también servirá para saber qué puedes hacer para llamar su atención. Haz distintas campañas apuntadas a zonas geográficas determinadas en caso de que quieras apuntar a lugares concretos.
Una vez alcanzada esa audiencia, procura generar relaciones duraderas. Generar un vínculo humano, preocuparse por ellos y por resolver sus inquietudes. Se sentirán escuchados, entendidos y confiarán en vos.
No te olvides que puedes llevar registro de cada uno de tus vínculos es igual de importante para poder optimizar los pasos a seguir en el proceso de fidelización con el cliente.
Volvemos con el consejo del principio. Sé tú mismo. Que tu marca refleje valores humanos y empáticos. Que sea diferente pero que permita que uno pueda identificarse con su misión. Lograr traducir eso a la imagen de tu negocio en las plataformas digitales es fundamental para distinguirte e identificarte.
Vender nunca es fácil. Es una cuestión de prueba y error donde se ponen en práctica distintas tácticas. No olvides la razón principal de por qué comercializas lo que estás promoviendo. Aprovecha las herramientas digitales que están al alcance de tu mano y llega a lugares nunca antes imaginados. El marketing digital no tiene límites.
O pide ayuda a un equipo de profesionales que estén dispuestos a darte una mano. Como Wisd Global, que trabaja con tus objetivos en la cabeza ¿Qué esperas?